Ocupar la mano (D-e-m-III)

Nada, nada, nada,
Nada puede cambiar el orgullo que siento.
Nada puede cerrarse mas sobre si mismo,
Nada puede lamerse con esta exactitud.
Se marcho hace ya algun tiempo,
Y no recuerdo el olor que con ella se llevo.
Pero recuero el olor de la epoca.
Recuerdo la primavera,
Y cuando esta llega, quedo quieto.
Inmensamente quieto, sin quiero.
Como en una mala pelicula.
Las rosas negras se ponen a marchar
Y las nubes blanquean.
Me miro, recorro mi cara,
Incluso la parte que no me gusta.
Me dio una vuelta completa, me tomo por la mano,
Y me enamoro con su maquina de mirar.
El dolor de no ser extranjero,
Cuando no hay nada que hacer mas que serlo.
Ser la nutria revolcada y atenta al girasol.
Siento la piel mucho mas lejos que las cosas que toca.
Las cosas que toca,
Estan adentro
Soy todo,
Soy el confin.
El infinito, la sustancia.
Epitelio cosmico.
Voy enfermo por el camino
Y solo quiero volver a casa,
Casa es una idea difusa.
Asi que sigo trotando
Y evitando encontrar su equivalente funcional.
Tengo una mula en la puerta de mi apartamento.
La mula del parabrisas.
La mula sin vertebras.
La cosa gigante.
La gallina sin lengua.
La enfermedad vibrando en la vidriera.
Vengan! vengan! vengan!
La humanidad en tres tristes pagamentos.
La humanidad violada, repta.
Bienvenida como un yonqui, apuñalada con morfina, vibra hasta vomitarse.
Las sabanas lloran cuando me cierras la vista.
La calle no es la escuela.
La calle es la calle.
La calle es una vena.
Nada mejor.
Nada como el sol que amenaza en la ventana.
Nada como la paloma que la sal espanta,
Pero no puede gritar.
El canguro grita desconfiado.
El tractor a toda maquina,
Se estrella contra su cria y la baba alcanza la acera.
Morir y morir y por fin,
Morir.
Bienvenidos a wop wop.