Saturday, August 18, 2012

Villa Dolores

Si las nubes fueran mías,
si mi piano fuera cobre
y tu pelo fuera azúcar.

Aunque yo no lo decía,
tu tristeza de sonido
me explotaba en los oídos.

Yo encharcaba un pasajero,
y escupía un caminero.

Yo caminaba solo,
porque me dolía el cuerpo entero.

Yo me sentía solo,
y mi perro aúllaba loco.

Qué martirio hay en tu luz abrasadora.
Pero espero no sea nada,
y mi viento se haga hielo.

Que en tu culpa el camino he muerto.
Si enfermo a que me digas
una sola esperanza de tus migas.

Hoy tropiezo y caigo por tus días.
Hoy me caigo y no los veo.

Soy yo el que espera y el que evita.
Soy yo que no abanonda
esta angustia que me irrita.

1 comment:

Anonymous said...

muy bueno che. me suena a tango. salu.